A veces viene y te dice que en realidad todo lo que pensás y hacés es un invento. Que te hacés el boludo con vos mismo. Que sos una gran mentira. Pero no importa. Nunca importó. La realidad es tuya para atarle los hilos, colgarla y marionetearla. Mantené la calma. Mantené el control. Jugá y apostá. Nunca fueron tus actos los que te definieron. Siempre fuiste vos y todo eso que sabés y que no compartís con nadie mas. Toda la amargura dulzona de saber lo que sos y la infinidad de los futuros.
Se que me leés.
Lame mis heridas.
Quiébrame el porvenir.
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