Slave-Me-Tender

Como una forma de pagar el mantenimiento del hechizo, aquí me tienen aporreando caracteres directo al universo digital que hace de pared de mi caverna para cicatrizar y sentir al futuro marcado por mi cruzada en este tablero presente. Así es: el dingo que masca la carne; el niño de cera que se derrite; el sol invicto calcinando esta calaca de caos en la que me veo reflejado. Hay un camino con brújula cardíaca. Hay un Magnadesignio al que someterse. Esclavizame.