Supongo que lo que trato de decir con todo esto es que uno tiene su propia perspectiva de la vida, distinta de la de todos los demás. No creo que sea un concepto demasiado difícil de comprender. Vidas distintas, mentes distintas, visiones distintas. Está copado eso. No, en serio, haceme caso.
El gran problema con cualquier período de transición es su incapacidad para definirse. Si se toma en cuenta que la vida es un período de transición constante de nacimiento a muerte uno podría llegar a considerar que es imposible definir tu vida y por ende, el concepto de quien sos, quien fuiste, quien vas a ser queda totalmente difuminado entre un abismo abstracto. No da que le des tantas vueltas al asunto, mejor sería que te calles y me compres un helado.
Es tierno en cierto sentido, porque nadie tiene idea de nada y eso tal vez comparte el atractivo con la inocencia. Se que podés verlo, se que te gusta.
Comprame de vuelta y te hago un descuento, un 10% por cada cosa adorable que tengas en tu ser.
Tu cargo final es entonces un roce y un susurro al oído.
Con intereses.